Consejos sobre los pies
de los niños de 6 a 18 meses

El pie del bebé es más adiposo y ancho que el del adulto, simulando un pie plano. Poco a poco irá desrrollandose, es importante controlar su crecimiento.

En la cuna...

Dejar al bebé patalear, jugar con sus pies descalzos.
Los zapatos de cuna no son imprescindibles; su función es la de abrigo, protección a pequeños golpes…

Descubriendo la casa a gatas...

Practicarle masajes y caricias en los pies. A ser posible deja que en casa vaya descalzo con calcetines.

Sus primeros zapatos han de permitir un libre movimiento de los dedos del pie.


Adaptándose al pie sin apretar demasiado para evitar rozaduras. Sobretodo tienen que ser muy flexibles, de piel y transpirables.

Valiendose por si solo:
los primeros pasos...

Déjale andar descalzo, los pies recibirán un pequeño masaje al pisar el césped, la arena o la moqueta…

El zapato tiene que ser suficientemente ancho o alto para no comprimir el pie. El largo le ha de permitir el libre crecimiento.

Las suelas, flexibles para no obstaculizar el movimiento natural del pie al andar y un pequeño contrafuerte en el talón ayudará a reforzar el equilibrio. pierna-pie.